- Odio a los niños que vienen a chingarme al trabajo.
- Odio a los niños que piden su "Jaloguín" a gritos en mi trabajo (deberían ir a mi casa, pa' que vieran cómo los recibiría).
- Odio tener que trabajar el "Día de Brujas".
- Odio trabajar.
- Odio usar la palabra "odiar".
- Odio que interrumpan mi "terapia" con música para preguntas estúpidas de neofitos que pretenden no serlo...
- Odio tener tan pocos motivos para odiar cuando el mundo entero se cae a pedazos...
8 Suicida(s) Virtual(es):
Madre mía, cuanto odio junto! jeje, es normal, creo que lo fácil es aprender a odiar y lo difícil aprender a amar en su totalidad...pero me ha parecido un post muy sincero, todos odiamos cosas, aunque creo que se utiliza esa palabra con mucha ligereza en sí... no creo que odiemos realmente nada ni nadie, no tenemos el corazón carbonizado no?
No nos conocemos pero busque silent hill por un post que hice, para ver si habia similitud alguna con otros blogs y apareció el tuyo entre otros, me apeteció comentar, espero no te moleste... y tranquilo, no podemos evitar sentir esas cosas no?
Un beso ;) JULS
salu2 and now, dont hate so much, hate is a terrible thing to waste!
worales!! k odiosa jajaj..si, es muy odioso eso de los chamacos...
saludos!
:P ya seee, concuerdo en mi ligereza para usar el término de odio pero lo que sí es cierto es que los niños me desesperan!! Pero bueno... Al menos ya puedo publicar en blogger despues de días de no poder hacerlo :D
Bueno creo que este es el clasico complejo que podemos llamar "complejo de gruñon" el de los pitufos, el cual perdura inevitablemente a lo largo de los años...no se ha encontrado la cura desgraciadamente...
Yupi!! *.*
que mamada!
pinche filosofia de 1o de primaria,
fumate un gallito para q empiexes a alucinar como Janis!!!
A eso sólo puedo responder: Yupi! *.* y yo no me oculto :P (hablando de cosas pueriles)
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